Como se pudo apreciar en el apartado sobre las ciudades inteligentes, algunas industrias incluidas en nuestro análisis están avanzando rápidamente y serán más críticas conforme vayan evolucionando, especialmente las ciudades inteligentes, la computación en nube, las coubicaciones y las energías alternativas.
“El crecimiento de la industria de la computación en nube y las coubicaciones continúa acelerándose”, indicó Gaunt. “Aquí en Asia, estamos justo al principio de la curva ascendente de la adopción de la computación en nube por parte de las industrias esenciales, y es probable que los servicios críticos futuros —las redes del IoT que dan soporte a pequeñas ciudades y al sector de manufactura, por ejemplo— se desarrollen en la nube. Los proveedores de servicios de computación en nube y coubicaciones están demostrando que pueden proporcionar una combinación de disponibilidad y comodidad que supera a la que muchas organizaciones pueden conseguir por sí solas y que atraerá a cada vez más instalaciones críticas en el futuro.”
Las energías alternativas, entre las que se incluyen la energía solar, la eólica, las pilas de combustible y el almacenamiento de energía, están creciendo a un ritmo del 42 por ciento anual y desempeñarán un papel cada vez más importante en la protección de las industrias contra la sobredependencia de la red eléctrica en el futuro. “Actualmente, la mayoría de implementaciones de las tecnologías de energías alternativas están complementando al suministro de los servicios públicos”, indicó Nation. “Sin embargo, estamos observando que los primeros en aplicar esta adopción utilizan las energías alternativas como su fuente de alimentación principal. Cuanto más puedan demostrar estas tecnologías su confiabilidad y rentabilidad, más viable será esta propuesta.”