La llegada de la tecnología de red móvil 5G a Colombia marca un punto de inflexión en el panorama digital del país, prometiendo revolucionar la conectividad y desencadenar una ola de innovación. Con su velocidad significativamente más rápida, menor latencia y mayor capacidad de red en comparación con las generaciones anteriores, el 5G tiene el potencial de transformar la forma en la cual los colombianos se comunican, viven, trabajan e interactúan con el mundo. Pero para que esto suceda, los centros de datos deben maximizar la eficiencia energética y térmica, especialmente para las principales empresas de telecomunicaciones que impulsan esta transformación, con el fin de ser operacionalmente más rentables.
Como capital, Bogotá se destaca como el hub principal de centro de datos del país, proporcionando un alto nivel en capacidad de ancho de banda y conectividad, lo que la convierte en una ubicación privilegiada para las inversiones en infraestructura digital. En diciembre de 2023, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) de Colombia anunció los resultados de la subasta de espectro 5G para la banda de 3.500 MHz. La subasta recaudó 1,3 billones de pesos colombianos, que se destinaron a la implantación de la red.
Llegada del 5G, la iniciativa de inversión
Según las investigaciones, el mercado colombiano de centros de datos recibirá más de 809 millones de dólares en inversiones para 2029. Desde mi punto de vista, sectores clave como la agricultura, la sanidad, la logística, la minería y la fabricación se beneficiarán de la mejora de la eficiencia operativa y de los ecosistemas más inteligentes que permitirá la 5G.
Los operadores ya han comenzado a implementar las redes 5G, lo que incluye la instalación de nuevas antenas, estaciones base, fibra óptica y equipos de red, así como la actualización de la infraestructura existente para adecuarla al ancho de banda y alcance de la nueva red. Se estima que para 2026, el 54% de la población colombiana tendrá acceso.
Retos de la eficiencia térmica
Este despliegue del 5G también plantea otros retos importantes, especialmente en la gestión de grandes volúmenes de datos y la demanda cada vez mayor de infraestructuras digitales de misión crítica, ciberseguridad y protección de datos. Los centros de datos deben tener en cuenta la cantidad de información que se va a almacenar y procesar, lo que se traduce en servidores más potentes, con mayor capacidad, mayor consumo de energía y temperaturas más elevadas.
Para soportar las demandas de 5G, muchos operadores de centros de datos se beneficiarían de diseños que: Minimicen las conversiones CA-CC para ahorrar energía y aumentar la eficiencia, desplieguen sistemas de alimentación interrumpida (SAI) de alimentación de corriente continua, actualicen a baterías de iones de litio que ofrecen mejor rendimiento y eficiencia que las baterías VRLA e inviertan en técnicas de refrigeración avanzadas.
Vertiv identificó consideraciones clave para la red de acceso del 5G, entre las que se incluyen:
- Garantizar una potencia y una capacidad de refrigeración adecuadas.
- Mitigar los altos costes energéticos.
- Gestión y supervisión de múltiples sitios de acceso.
Para hacer frente a las demandas del 5G, los dispositivos del internet de las cosas, el big data, la computación en la nube y el previsible aumento de la potencia de procesamiento y las altas temperaturas, Vertiv puede ofrecer soluciones de refrigeración asistida por aire energéticamente eficientes, armarios con puertas intercambiadoras de calor, refrigeración directa al microprocesador e inmersión de los servidores en líquido no conductor, entre otras soluciones y servicios.
Para más información sobre las soluciones de Vertiv, visite nuestra página dedicada a la región aquí.