La 5G permitirá la integración de nuevas tecnologías como big data, la inteligencia artificial (IA) y la Internet de los objetos (IoT).
Centroamérica se encuentra en un momento crucial en su camino hacia la digitalización, en el que la adopción del 5G juega un papel fundamental. Según el informe "5G Use Cases in Vertical Markets in Latin America and the Caribbean" de 5G Americas, la región de América Latina y el Caribe contará con 127 millones de conexiones 5G para finales de 2024 y puede llegar a 501 millones cuatro años después.
Este avance no solo implica una mejor conectividad, sino que abre las puertas a una serie de oportunidades que podrían transformar la economía regional. Su despliegue permitirá la integración de tecnologías avanzadas como big data, inteligencia artificial (IA) e internet de las cosas (IoT), lo que sienta las bases para una mayor productividad, un aumento de la demanda de productos y servicios tecnológicos, así como la aceleración de otras industrias en última instancia la atracción de inversión extranjera directa. Para que esto suceda, la región necesitará una infraestructura digital crítica que permita la 5G.
Desafíos en la región
Para que las redes móviles 5G avancen con rapidez y eficacia, los mercados verticales tendrán que invertir en infraestructuras críticas, como sistemas de refrigeración que eliminen el calor para permitir un funcionamiento continuo, tecnologías para supervisar y gestionar a distancia la 5G y tecnologías de alimentación que optimicen el uso de la energía y minimicen el impacto ambiental.
Según los estudios de Vertiv, se espera que la transición al 5G aumente el consumo energético global de la red entre un 150 y un 170 % de aquí a 2026, con los mayores incrementos en las áreas de macro, nodos y centros de datos de red. Para hacer frente al despliegue y la infraestructura de 5G, los operadores pueden plantearse despliegues masivos de infraestructura en cortos periodos de tiempo para satisfacer la demanda. Como resultado, se espera supervisar y mantener un gran número de sitios de acceso. Una solución de monitorización remota sería esencial para minimizar los costes operativos y garantizar que todos los sitios se gestionan de forma inteligente y eficiente.
Para lograr todo esto, los países de Centroamérica deben trabajar en agendas para cerrar la brecha digital y ser competitivos con el resto del mundo. En promedio, el 84% de la población de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) utiliza internet, mientras que en Centroamérica, Panamá y República Dominicana (CAPARD), la cifra es del 47%, un número que potencialmente indica dificultades y retos no abordados especialmente por temas de infraestructura y déficit de banda ancha revelados en su informe BID 2020.
El potencial impacto económico del 5G en América Latina
Mientras que el 5G permitirá la posibilidad de tener un millón de dispositivos conectados por kilómetro cuadrado, un entorno digital avanzado también aumenta la demanda de productos y servicios tecnológicos, así como la creación o aceleración de otras industrias. Además, la mejora de las infraestructuras atraería inversión extranjera directa (IED) de empresas tecnológicas y startups para desarrollar y probar nuevas aplicaciones y servicios, creando y destacando oportunidades de empleo para el talento centroamericano.
Estudios de la GSMA muestran que el 5G puede aportar aproximadamente 41.000 millones de dólares al PIB de América Latina para 2030. Esto se debe a los beneficios asociados con la mejora de la conectividad y la creación de nuevas industrias. Algunos de los sectores en los que visualizo un impacto significa con la digitalización y la adopción del 5G son:
- Salud especialmente en telemedicina y acceso a servicios médicos avanzados
- Educación, donde estudiantes, educadores y otras partes interesadas pueden acceder a recursos educativos digitales y a la expansión de la enseñanza a distancia.
- Agricultura, mediante la implantación de la tecnología IoT para mejorar la eficiencia y la productividad.
- La industria, gracias a la automatización y digitalización de los procesos industriales que pueden impulsar los gemelos digitales en la fabricación y los procesos.
- Turismo, ya que facilitará y mejorará la experiencia mediante el desarrollo de aplicaciones y servicios digitales.
En las primeras fases del despliegue de la 5G, gran parte del desarrollo se centrará en las infraestructuras. Habrá que actualizar la infraestructura existente e invertir en nuevo hardware para soportar el aumento de la demanda.
Los sectores que podrían beneficiarse rápidamente de la llegada del 5G a la región son la agricultura y el turismo, ambos vitales para las economías de los países. En agricultura, el 5G podría permitir el uso de sensores para monitorizar cultivos y plagas, mejorando la productividad con datos en tiempo real. En el turismo, la automatización de la programación de visitas y el uso de aplicaciones para explorar lugares históricos y naturales ofrecerían una experiencia única al visitante.
Aunque no hay estadísticas por sectores, desde mi punto de vista, la educación y la industria son los que podrían beneficiarse del 5G a medio plazo, porque necesitan menos inversión, en comparación, por ejemplo, con la salud, cuya adopción puede ser más tardía debido al coste y la complejidad de la monitorización de pacientes y la cirugía a distancia.
Abordar los desafíos de la adopción acelerará el despliegue de 5G, avanzará la digitalización que Centroamérica necesita. Esto habilitará herramientas que pueden mejorar la capacidad de la región para crear un entorno productivo que puede crear medios de vida, proporcionar más oportunidades para las inversiones extranjeras e impulsar la economía. Las empresas que estén preparadas para la adopción temprana estarán bien posicionadas para beneficiarse de las muchas oportunidades de la transformación digital.
